REINA DEL CANDOMBE

Cándida Medina, la vedette salteña que quieren las comparsas capitalinas

Cándida Medina es la laureada vedette salteña, integrante de la comparsa lubola local, Tunguelé. La escultural morena, que ha sido elegida como la mejor vedette en las dos últimas llamadas al Puerto, en los desfiles de carnaval de Salto y en las llamadas regionales de Soriano, es codiciada por las comparsas de Montevideo, y ha recibido algunas propuestas para incorporarse el carnaval que viene. Sobre los reconocimientos alcanzado hasta el momento, Cándida nos dijo: “Para mi es un orgullo ya que he tenido que competir con figuras importantes. A hora esta vez, en las Llamadas al Puerto pensé que iba a ser fácil, pero no lo fue, vinieron muchas rivales importantes, pero igual supe hacer las cosas bien, y por suerte me fue bien”. Es bueno comentar que cuando Tunguelé desfiló en Soriano, muchos especialistas, gente de la organización y de los medios de prensa, preguntaban a los integrantes de la comparsa salteña de dónde habían sacado a la vedette, si era montevideana o brasileña. Cándida ante eso nos dice: “es verdad, incluso a mi me preguntaron si era de Montevideo o si era brasileña. Yo me preguntaba qué tiene que ver el candombe con el samba?. Como hay gente que no sabe que es una cosa y otra por ejemplo, acá, ponen candombe en muchos lugares y salen bailando samba”.

La bailarina de Serenata Africana que estuvo viendo el certamen también preguntaba de donde la habían sacado a esa voluptuosa y talentosa vedette. Consultamos a Cándida si ese embrujo que despierta al bailar tiene una escuela o le surge natural, nos respondió: “Yo tengo siete años de escuela de baile, me faltan dos años para recibirme, que dentro de poco tengo pensado seguir para recibirme de profesora de danzas españolas, danzas contemporáneas y muchas cosas más. Aparte de eso me especialicé en aprender muchos tipos de danzas. Pienso que esto de tener escuela de baile ayuda mucho”.

EL CUERPO VIBRA CUANDO SUENAN LOS TAMBORES

- El estar en las calles, y comienzan a sonar las lonjas y empezar a bailar, ¿Qué sensaciones te provocan?.

- “Eso me decían las chicas el otro día. Yo hasta el momento en que vamos a salir yo estoy tapada y estoy concentrada, no quiero que me hablen mucho, porque estoy pensando cada paso que voy a dar. Y también eso que te surge desde dentro. En el momento en que empiezan a sonar las maderas de los tambores, chas-chas-chas, ahí es cuando uno entra en personaje mismo. Pero después que uno llega, que culmina el desfile, ahí vuelvo a ser la Cándida de siempre”.

- ¿Por qué se te ve muchas veces en los desfiles ir y venir entre las cuerdas de tambores, como ocultándote del público?

- “No, es una manera de retroalimentarnos con la cuerda de tambores. Yo voy y vengo entre las cuerdas, le bailo a cada uno de los tamborileros, y ellos se incentivan y tocan con más ganas, a su vez, ellos me dicen cosas que me provoca una electricidad y venzo al cansancio, bailo con más ganas, con más fuerza. Es eso simplemente, yo necesito hacerlo y ellos también tenerme cerca y cada tanto lo hacemos en el desfile”.

Cándida nos cuenta que sus comienzo como vedette fueron en Sudacam, aquella comparsa del Barrio Artigas que dejó sus huellas en el carnaval salteño.

- ¿Tu futuro?

- “Yo quiero seguir bailando y ser la vedette de Tunguelé por mucho tiempo, pero también tengo pensado ir a seguir estudiando a Montevideo. Lo otro es que hay comparsas de Montevideo que quieren que vaya con ellos, pero todavía no tengo decidido, vamos a ver que pasa más adelante, por ahora disfruto lo que me dejó este carnaval”