Uno que se crió en un hogar de laburantes, que cuando empezó a trabajar se afilió al sindicato, que iba siempre a la plaza los 1° de Mayo, que en Salto, siempre fuimos pocos a ese ritual obrero, es cierto, pero allí estábamos. Es más, uno sabía, año tras años quienes iban a estar y dónde se ubicaban, así que para tomar mate u otras cosas de las materas, mientras aplaudía los discursos y se entonaba con vivas a la clase trabajadora, uno se juntaba a conversar con los conocidos, sabiendo que fulano, siempre se ubicaba en aquella punta, mengano si está bien, viene con nosotros sino se va bien adelante, si está con rabia o allá en el fondo, si anda bajoneado…..
Y que se sepa el primer día de mayo es el día del trabajador, los otros 364, de quién son, como se preguntaba Ruben Olivera. La verdad nunca supe si teníamos otro día, salvo, allá a los lejos, algún aumentito o en la cobrada del medio aguinaldo y otros rebusques, esos también pueden ser considerados días del trabajador. Tener un día en 365 que tiene el año, no es mucho, pero, algo es algo, peor es nada.
Una de las tradiciones del día del trabajador, en casa por lo menos, es comer empanadas, tomar un buen vino y después salir entonado para la plaza.
Pero parece que ahora, el 1° de mayo no es el día del trabajador solamente, porque, ahora se juntan los sindicalistas, los empresarios, los gobernantes, los diplomáticos, los políticos, comparten un asado, y están todos, como decía Discepolín “da lo mismo que sea cura/colchonero/ rey de basto/ caradura/ o polizón…”, para el “festeyamento”.
Antes teníamos el carnaval para disfrazarnos, de lo que quisiéramos. Los esclavos negros tenían los 6 de enero el San Baltasar y allí se ponían las ropas de los amos y se transformaban. Hoy políticos, empresarios, gobernantes, diplomático se visten los 1° de mayo con ropas obreras, camisas sin corbatas o buzos, camperas desgastadas, algo despeinados, sin afeitarse y haciendo chistes gruesos…se sienten más cerca de nosotros…
Esto me lo contó un periodista dice que iba a cubrir el almuerzo en el Quincho de Varela, y para ponerse a tono iba cantando aquella canción de María Elena Walsh que decía: “ Me dijeron que en el Reino del Revés/ nadie baila con los pies, /que un ladrón es vigilante y otro es juez/ y que dos y dos son tres./Vamos a ver cómo es/ el reino del revés/”.
Me dijo que cuando entró vio la fauna que vio, y no lo podía creer. Se pellizcaba, se rascaba la cabeza, y se puso en posición de loto, para meditar, centrarse y no creer que estaba quedando loco. Así que se puso a cantar bajito… “Me dijeron que en el Reino del Revés/ cabe un oso en una nuez,/ que usan barbas y bigotes los bebés/y que un año dura un mes./ Vamos a ver cómo es / el Reino del Revés”.
Mi amigo ve
que andaba Calloia y un poquito más allá, López Mena, y según le contaron, en
cualquier momento llegaban Lorenzo y el caballero de la derecha… “Macanudo,
saludos a Pluna!!”.- Dijo, mientras cantaba: “Me dijeron que en el Reino del
Revés/ hay un perro pekinés /que se cae para arriba y una vez/ no pudo bajar
después”.
Por allá andaban Abdala del PIT-CNT y Juan Castillo, ex
PIT-CNT, conversando animadamente con empresarios y políticos “de derecha”. Más
acá la embajadora de Estados Unidos, Julissa Reynoso bromeaba y departía
amablemente con el Embajador de Venezuela Julio Chirino…Mi amigo se tomaba un
White horse, que era como tomar coraje, y se le daba por seguir cantando: “ Me
dijeron que en el Reino del Revés/ una araña y un ciempiés/ van montados al
palacio del marqués/ en caballos de ajedrez”.
Por allí andaba Cachete Espert cantando saludos
carnavaleros de Los Saltimbanquis. La Princesa D’aremberg meta darle a la sin
hueso con la Primera Dama, Lucía, la señora del Pepe…y Mi amigo, se tomó otro
on de rock y salió chiflando bajito, tenía material para rato….
- Nosotros,
aquí en el bar del cacho, podríamos hacer algo parecido, ¿no?.
- Es
mucha mezcolanza…
- Para
usted será mezcolanza, para mi es un ejemplo de tolerancia…
- Y
bueno, hagamos un Quincho de Varela aquí en Salto…
- O de
Goñi, por blanco no va a ser la cosa…
- Ta
el edil que le dicen Samán, también…
- Pero
mire que hay muchos quincho aquí en Salto, y muy conocidos, si me pongo hablar…
- Deje,
deje, no se meta con los peluquines que usted no es peluquero, ni siquiera
coiffeur..
- Ahora,
mire que un lugar así, donde se reúnen de todos los pelos ya hay en Salto, se
juntan los jueves, a mi nunca me invitaron, pero, sé que es como la ONU están
todos los representantes….
- Che,
y si nos juntamos para ver el clásico mañana?. Ustedes pongan el asado dijo uno
que la bebida la llevo yo…y apareció con cinco sobrecitos de jugolín….
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